Por otro lado, cabe destacar la importancia que las empresas
dan a la competitividad y a la eficacia, dentro del libre mercado; por tanto, a
los trabajadores no sólo se les exige una mano de obra adecuada sino
flexibilidad, disponibilidad para hacer horas extras, capacidad para viajar,
trabajar fines de semana, incluso cambiar de residencia en algunos casos, y es
por esto, aunque si bien es cierto que no lo justifico ni mucho menos apoyo,
que las empresas se muestran recelosos a la hora de contratar a una mujer, pues
siempre estará menos dispuesta a lo dicho anteriormente, pues el deseo de la mayoría
de ellas, entre las cuales, me incluyo, es poder compaginar la vida laboral con
la familiar.
Otra cuestión más, ¿ quién no se ha planteado alguna vez en
su vida, el porqué existen tan pocas mujeres en altos cargos?, ¿ por que la
mayoría son hombres?. Es por tema de una sociedad machista o vas más lejos, no
será que nos han educado e inculcado unos valores y unos roles donde el papel
de liderazgo estaba asignado a las propias cualidad del hombre, y las cuales,
obviamente carecía la mujer. Y porque no, hablar de las propias expectativas
que se tienen acerca de las mujeres, se les atribuye más el fracaso que el
éxito, y pensando esto, ¿qué jefe estaría dispuesto a contratar a una mujer, si
ésta va a llevar a la quiebra a su empresa?.
Así pues, estando ante una entrevista, se presentan dos
personas una del género masculino y otro del femenino, ambos igual de
cualificados para el puesto, o inclusive la mujer mejor preparada, ¿ a quién creéis
que van a escoger?, habéis acertado, al hombre y en casos excepcionales si la
persona elegida es la mujer,¿ creéis que recibirá el mismo sueldo?.
Todas estas cosas, están a la hora del día, asique mujeres
del hoy y del mañana reclamemos nuestros derechos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario